Ángel Lauviah
Propiedades
Ángel: número 11 de La Cábala
Coro al que pertenece: Querubines. Tronos.
Se sitúa en la esfera de Hochmah y trabaja asuntos relacionados con la esfera Yesed.
Significa: “Dios Loado y Exaltado”
Coro al que pertenece: Querubines. Tronos.
Se sitúa en la esfera de Hochmah y trabaja asuntos relacionados con la esfera Yesed.
Significa: “Dios Loado y Exaltado”
Esencia que aporta: Victoria.
Príncipe: Tzadkiel Planeta: Sol, Urano.
Color: Sol Metal: Oro Piedra: Diamante Signo: Tauro
Atributos:
Este querubín se invoca para pedir ayuda para conseguir la victoria, y
también el desarrollo de nuestras cualidades interiores. La
Victoria siempre buscando justicia y utilizando adecuadamente esa
sabiduría resultante de amor exaltado por lo divino y el altruismo.
Cuando nos elevamos por encima del laberinto y con todas las fuerzas
posibles se deja atrás vanidad y orgullo, se consigue la primera Victoria, la
que abre las puertas a otros logros. Comprendemos entonces que para conseguirlo
es preciso estar siempre atentos a la batalla que precede a ese logro. Deberíamos
marcarnos proyectos y alimentarlos con energía, con paciencia y esperar a su
buen término para empezar con otros nuevos, ya que si la victoria está
asegurada pero no hacemos nada por merecerla, ésta llegará pero en forma de
derrota, a través de baja autoestima o tristeza, de fuertes crisis o de sucesos
que aparentemente son injustos y no creemos merecer.
Este ángel nos permitirá salir victoriosos de cuantas luchas se libren
en la vida. De cualquier forma influye sobre los grandes personajes,
los sabios y aquellos que triunfan por su talento. Rige sobre las altas ciencias y facilita maravillosos descubrimientos.
Además, te ayuda a conocer cuál es tu naturaleza y cumplir tu misión de
vida, enseñándote el camino. Estará dotado de un gran poder
espiritual.
Proporciona consecución de la celebridad, gracias al talento y protección contra el orgullo, la ambición desmesurada, los celos y las calumnias.
El ángel Lauviah posee grandes cualidades
para abrir nuestra mente. Es el
Ángel de las Revelaciones, penetrando el inconsciente, trabajando el
entendimiento a través de las intuiciones, la telepatía, las revelaciones en
sueños y en estados alterados de conciencia. Además nos permite dormir bien y
aliviar el insomnio, pues combate las dificultades y las aflicciones del
espíritu. Entiende como nadie el sufrimiento de las personas. Puede
aprovecharse de este don, dedicándose a la medicina, psicología o a la
comunicación social.Proporciona consecución de la celebridad, gracias al talento y protección contra el orgullo, la ambición desmesurada, los celos y las calumnias.
Este ángel ayuda a sus protegidos a obtener éxito a
aquellos con vocación política, a ser experto en su profesión o habilidades, e
inspira a la personas con confianza, entusiasmo y alegría exaltando el amor al
trabajo que sea útil y beneficioso para la humanidad.
Los nacidos bajo el ángel Lauviah son
personas creativas, inspiradas y sensibles, las cuales están bien dotadas para
el arte en todas sus expresiones, pues logran plasmar las emociones que desean
a sus obras. Bajo la influencia de este ángel, amará la música la poesía, la
literatura y será un vicioso de la lectura. Serán sensitivos, serenos y pacientes. La armonía que reflejan logra rodearlos de personas que buscan tranquilidad y regocijo. Sus pedidos serán atendidos, principalmente si fueron hechos para auxiliar al prójimo. Conseguirá hacer realidad todos sus deseos principalmente en el campo de las relaciones afectivas.
SALMO PARA
INVOCARLO
Salmo 18,
versículo 47
LAUVIAH:
Dios que eternizas las situaciones y que das el placer del renombre a los que
viven en tu paz, a ti te pido que me ayudes a sacar de mis adentros aquello que
de algún modo puede ser útil a la renovación de la vida.
Saca de mi pasado, ¡Oh, LAUVIAH!
sólo aquello que hable del eterno amor, sólo aquello que sea razonable y justo, y encierra en mi la complacencia en lo episódico, en lo que se hunde bajo el peso de las convenciones.
Destruye mi orgullo, mis vanas apetencias, y no permitas que los celos me inciten a levantar falsos testimonios.
Que pueda, ¡Oh, LAUVIAH!, ser ejemplo de las virtudes que emanan del Padre.
Saca de mi pasado, ¡Oh, LAUVIAH!
sólo aquello que hable del eterno amor, sólo aquello que sea razonable y justo, y encierra en mi la complacencia en lo episódico, en lo que se hunde bajo el peso de las convenciones.
Destruye mi orgullo, mis vanas apetencias, y no permitas que los celos me inciten a levantar falsos testimonios.
Que pueda, ¡Oh, LAUVIAH!, ser ejemplo de las virtudes que emanan del Padre.
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