31 ago 2016

Arcángel Uriel. Parte II



Funciones del Arcángel Uriel

El arcángel Uriel, patrón de los que buscan la sabiduría


El arcángel Uriel es el patrón de los que buscan eliminar la ignorancia. Protege a los maestros, líderes espirituales, sacerdotes, filósofos, rabinos, gurús, ministros y a todos los que aman la sabiduría espiritual.
Es el arcángel de la flama rubí. Fomenta el servicio divino y es el líder de los ángeles guardianes. Con su llama divina ayuda a esparcir la verdad y la sabiduría por el mundo.

Función de vigilante
Junto con el Ángel de la guarda, Uriel vela porque el camino del ser humano sea recto y su visión clara. Su llama enciende en el ser el deseo de servir en la misión de despertar la conciencia humana para lograr alcanzar la paz y la gloria de Dios.
Función de “vigilante del mundo” relacionada con aquel libro que suele aparecer en sus manos, libro éste que,  representa una lista de los seres humanos con los respectivos pensamientos, sentimientos y actos que han efectuado a lo largo de sus vidas.

Lleva así Uriel una cuenta necesaria para ver quiénes irán al Infierno, lugar del cual supuestamente él tiene la llave; pero, pese a ser así, no desea que nadie se condene, por lo cual suministra el don sobrenatural del arrepentimiento a las almas que aún pueden salvarse.

 

El que despierta las conciencias

Astrológicamente se le considera como Regente del Sol, por lo cual usualmente se le ha representado con un sol detrás de la cabeza. Ese sol,  ubicado de modo equivalente a la aureola (símbolo de la conciencia iluminada y pura) de los santos, está asociado con la llama que Uriel porta, llama que representa al fuego espiritual de la verdad. Viene así el sol a ser una forma de simbolización de la más elevada función de Uriel: el despertar, a través del “fuego de la verdad”, la conciencia de los seres humanos.

Canalizador de  la energía de la abundancia
En el esoterismo de entre todos los siete arcángeles, Uriel es aquel que está asociado a la materia, al elemento tierra, en virtud de lo cual, es Uriel el arcángel encargado de canalizar las energías de la abundancia, siendo por ello el arcángel que se encarga de otorgar favores materiales (dinero, trabajo, casa, etc) y, a unos poquísimos elegidos, lo que se ha llamado “opulencia bien merecida”.






 Arcángel de la Paz y el Arrepentimiento

Las virtudes asociadas a Uriel son principalmente la paz, la armonía, la justicia, la estabilidad, la claridad mental, la visión de la  verdad.
Él puede proveer los siguientes dones: paz interior, arrepentimiento y voluntad para enmendarse, conexión con la voz interior del alma y capacidad para entender lo que ésta nos dice, sabiduría para entender por qué las cosas son como son y de qué forma lo aparentemente negativo es muchas veces dispuesto para futuro bien de nuestro espíritu. Nos otorga paciencia, confianza en Dios, control de la ira y el temor, renovación de la esperanza, provisión, éxito material e inspiración artística (sobre todo en la Poesía).






 Oración
‹‹Amado Arcángel Uriel: cúbrenos con un manto de paz a todos nosotros que vivimos en la Tierra, otórganos el suministro divino, actúa en cada uno de nosotros con tu bendita presencia. Danos dones espirituales: paz interior, tranquilidad de espíritu, resolución de los problemas de ira y temor, renovación de la esperanza, resolución pacífica de los problemas en las relaciones personales, sociales y profesionales.
Arcángel Uriel, ángel de la paz, a ti acudo solicitándote que me ayudes cada día a tener y conservar aquella tranquilidad de espíritu, aquella incondicional paz interior que nace de ver la realidad a través de la sabiduría espiritual que surge de la conexión con El Padre Celestial, con la esencia de la vida verdadera y con aquella chispa divina que Dios ha puesto en cada uno de nosotros. Así sea››

Arcángel Uriel Parte I



Uriel


En hebreo "Dios es mi luz" o "Fuego de Dios". Uriel hace referencia al ángel de la luz, luz de las estrellas.
Es el nombre de uno de los siete arcángeles, en el judaísmo rabínico y en algunas tradiciones cristianas, como la ortodoxia y la copta.
Aparece mencionado en los textos apócrifos y cabalísticos como Uriel, Nuriel, Uryan, Jeremiel, Vretil, Suriel, Auriel, Puruel, Phanuel,  (Cara de dios), Fanuel o Jehoel.
 En la angelología cristiana  Uriel es identificado a veces como Serafín, Querubín, Regente del Sol, Llama de Dios, Ángel de la Presencia Divina, (uno de los siete espíritus que están ante el trono de Dios, que menciona el Evangelio de Juan) y Arcángel de la Salvación, por sobre el Tártaro (Infierno).

Por último, se le considera el Arcángel del Arrepentimiento y la Retribución, así como también el Arcángel de la Justicia, la Paz y de la Salvación.

 

Sus atributos

 Representa la fuerza todopoderosa del espíritu de la vida. Su atributo es una llama de fuego: es el fuego de la verdad, de la iluminación, de la purificación; es la llama de la alquimia o transformación interior, que representa su misión de despertar la conciencia de los seres humanos con el fuego de la verdad.
Puede llevar un libro o pergamino. Este atributo representa su papel de observador divino. Lleva la cuenta de los sentimientos, pensamientos y actos de los seres humanos durante su recorrido por la vida. Según otras interpretaciones, ese libro representa la sabiduría propia de Uriel o su función de intérprete de profecías y juicios.
A Uriel se le representa vestido de rojo o anaranjado y dorado, colores relacionados al fuego y a sus cualidades de transformación, destrucción del mal e iluminación espiritual. Son además los colores del Sol, el astro con el que John Milton asocia a Uriel en su obra “Paraíso perdido. ". Uriel está considerado patrono de las artes y fue descrito por Milton como el "espíritu de visión más aguda en todo el cielo".
A veces se lo ha puesto con una espada de fuego, espada que simboliza el poder para destruir la ignorancia y conquistar el conocimiento verdadero.
Día de la semana: Viernes
Chakra: Tercer chakra
 





Uriel en el judaísmo

En el judaísmo Uriel adquirió el significado de su nombre como “Llama de Dios” o “luz de Dios”, de allí que, en la tradición judía, el Arcángel Uriel haya sido nombrado como “quien trae luz a Israel”. En los diez libros más antiguos de La Biblia los ángeles no son designados por nombres.
Uriel es nombrado en el apócrifo Libro de Henoc. Es el primero en la lista de siete: Rafael, Raguel, Miguel, Sariel, Gabriel y Remiel. Allí, intercede ante Dios por la humanidad, durante el período de los Vigilantes caídos y sus hijos, los Nephilim. También  advierte a Noé del Diluvio  Universal.
 En algunas versiones del pasaje Enoc se menciona a Uriel, que es el “Ángel del mundo y del lugar de los muertos”, (Hades, Tártaro,Sheol) o "que está sobre" ellos”, siendo nombrado en otras como “el Ángel del trueno y del temor”. Fue  igualmente conocido como el “Ángel del Arrepentimiento. Otra cita del Libro de Enoc menciona a Uriel entre los cuatro arcángeles en lo alto del cielo.
Uriel también es mencionado en otras obras:
En el Testamento de Salomón es el tercero en la lista de arcángeles y en el Apocalipsis de Esdras, Uriel es enviado a responder a Dios sobre los humanos. Instruye también al profeta Esdras sobre la verdad. Es así considerado  arcángel vinculado a la verdad simbolizada por la llama que, en ciertas imágenes, aparece portando. Uriel le dice a Esdras que Dios le ha “permitido describir las señales sobre el bien y el mal en el mundo”. Las sabias palabras del arcángel muestran la incapacidad del hombre para comprender la naturaleza real de la pureza-incorruptibilidad y, por extensión, la impotencia del hombre para entender ciertas verdades morales y espirituales.

 


A partir de las Tradiciones místicas judaicas, Uriel fue visto como el ángel regente del domingo, el ángel patrono de la Poesía, el aniquilador de los ejércitos de Senaquerib, el ángel que luchó con Jacob en Peniel y uno de los Sephiroth sagrados. Finalmente, se le atribuyó el rol del ángel que portaría las llaves de El Abismo en El Fin de Los Tiempos.








 En Leyendas de los Judíos se le presenta a Uriel como el  ángel que  guió a Abraham sacándolo de la ciudad de Ur, que dio nuevo nombre a Jacob, (Génesis). También se presenta a Uriel, guiando a Abraham y marcando las puertas de las casas de los hebreos en Egipto, para protegerlos (Éxodo). En el mismo texto también se dice que Uriel fue el ángel que se le presentó a José.
En el Libro de Adán y Eva, Uriel es identificado como el querubín que permanece junto a las puertas del Edén con una espada ardiente para evitar el acceso de los humanos al árbol de la vida (Génesis). Afirma que fue quien sacó del Edén a Adán y Eva después de que pecaran. También se le identifica como uno de los ángeles que dieron sepultura a Adán y aAbel.
La moderna Angeología Sincretista afirmó que Uriel podía ayudarnos a entender las leyes del karma. .


El arcángel Uriel en el cristianismo

La Iglesia Católica sólo da reconocimiento oficial a tres arcángeles puesto que sólo tres se nombran en la Biblia: Miguel, Gabriel y Rafael. A Uriel, junto con los otros arcángeles, no los niegan pero tampoco los afirman en el sentido de que dentro de la doctrina oficial sean referidos como seres que indudablemente existen.
En el cristianismo antiguo, el arcángel Uriel era venerado junto a Miguel, Gabriel y Rafael. Fue  el papa Zacarías quien, durante el Concilio de Roma del año 745, prohibió el nombre del arcángel Uriel e hizo que se destruyeran sus imágenes en todas las iglesias de Roma, borrando así su huella de la Casa de San Pedro…
Sin embargo el sol de Uriel no se apagó del todo y el arcángel continuó presente en las mentes de algunos fieles, por lo que todavía se pueden encontrar imágenes suyas que datan del siglo XVII en iglesias de Sudamérica.

 
Virgen de las Rocas


La Iglesia Ortodoxa Oriental venera al arcángel Uriel y lo conmemora junto con los otros ángeles y arcángeles durante la "Synaxis del arcángel Miguel y los otros poderes", el 8 de noviembre.
También la Iglesia Anglicana lo incluye entre los arcángeles y además le da el status especial de ser un “Santo Patrono del Sacramento de la Confirmación”.
La Iglesia Copta, que conservó la Biblia Septuaginta (que contiene el Libro de Enoc, apócrifo para el Catolicismo), siempre ha venerado al arcángel Uriel.
 En los evangelios apócrifos de la Biblia, Uriel ayuda a Juan el Bautista a sobrevivir la masacre ordenada por Herodes. Lo lleva junto con su madre a Egipto, y lo reúne con la Sagrada Familia, relato que inspiró la obra de Leonardo da Vinci “La Virgen de las Rocas”.
 En el Apocalipsis de Pedro es el Ángel del Arrepentimiento. En la tradición apocalíptica, Uriel tiene la llave del Infierno, que abrirá al Final de losTiempos






ORACIÓN
‹‹OH. Dios, por intercesión de tu glorioso Arcángel San Uriel, Acompáñame, enséñame y guía mis pasos hasta alcanzar aquí la vida eterna.
 Poderosísimo Arcángel Uriel, tú que eres la luz de Dios, ayúdame a espiritualizar mi vida diaria, ponme en armonía con la Madre Tierra, respetándola y amándola. Bendíceme con tu don de abundancia material y espiritual, ayúdame a materializar mis ideales y haz que mi cuerpo sea un Santuario digno de recibir y manifestar el poder de Dios.  Amén››